Bannack fue un campamento minero al pie de las montañas Pioneer; llegó a ser la primera capital del Estado de Montana, en el Pacífico Noroeste y las Grandes Llanuras. Sin embargo cuando se acabó el oro se convirtió en un pueblo fantasma.
Son alrededor de 50 edificios que están tal como cuando fueron abandonados, bien conservados ya que el lugar fue declarado Parque Estatal y se sostiene con el esfuerzo del gobierno, los propietarios y la comunidad.
Bannack nos invita a recorrer sus calles desiertas para revivir los agitados días de la fiebre del oro. Fue llamada “Reina de los Campos de Oro”, y cada año recibe a miles de visitantes de todo el mundo, mientras los esqueletos de hierro y ladrillo custodian silenciosamente las minas de Montana y los secretos de su propio origen.
Hay muchísimo para ver y hacer en el Parque Estatal Bannack. Comencemos por el Centro de Visitantes. Está abierto los siete días a la semana de 10 a 18 h. y sólo cierra en el invierno, entre octubre y mayo. Aquí podremos encontrar libros, material explicativo y videos. El edificio fue propiedad del residente George French, un carpintero que, se cree, construyó el ataúd de Henry Plummer, uno de los protagonistas de esta historia.
Otros lugares para ver son la Oficina de Ensayos, en la que se analizaba el mineral extraído, que en Bannack tenía un 99 a 99.5% de pureza; el Hotel Meade, escenario de la primera Sesión Legislativa en 1864; en 1890 fue convertido en un lujoso hotel que se transformó en el centro de la actividad social y funcionó hasta la década del 40 del siglo pasado. La horca, cuya construcción fue ordenada por Henry Plummer, dueño de la ley y la no-ley en Bannack; aquí fueron ajusticiados cinco hombres, ¡entre ellos el propio Plummer! Al este de la horca, sobre una colina, el cementerio antiguo; fue utilizado hasta 1880.
Queda mucho en el tintero, como la casa de Roe Graves, la primera casa de madera de Bannack, la Iglesia Metodista, primer edificio con fines de culto, el Molino Hendricks que ofrece una visita especial, y la sede de la Logia Masónica, con su clásico emblema de la escuadra y el compás, construida en 1874 y que funcionó como escuela casi 70 años. Por último la mansión del gobernador, Mr. Edgerton, que había sido un antiguo almacén y fue destruida por un incendio en 1900.
Si llegan en verano podrán participar de una auténtica jornada de lavado de oro. Si la idea es quedarse, pueden pasar la noche en el campamento de la ciudad fantasma. El Parque Estatal Bannack se encuentra en Bannack Road, condado de Beaverhead y es muy fácil llegar por la carretera I 15 o la estatal 278.
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