El destino de nuestro planeta depende ahora de la toma de conciencia de todos, de intentar hacer algo que pueda contribuir a no hacer del cambio climático un evento tan dramático. Los cambios de temperatura, las especies indefensas a tal cambio, el porvenir de las naciones que sufrirán inundaciones, y las que sufrirán sequías… es un tema en el que se tiene que tomar partido no desde el plano intelectual, sino más bien desde la practica, desde los hechos.
En San Francisco, en octubre de 2007, la Academia de Ciencias inauguró su nuevo local, un estupendo museo que tiene por particularidad ser ecológico, es más, muchos lo llaman el museo más ecológico del mundo.
El edificio fue construido nada menos que por Renzo Piano, uno de los mejores arquitectos del momento, quien desde el principio se encontró fascinado con la idea y desarrolló un obra de arte al que ya miles han ido a conocer.
Literalmente el museo ha causado sensación y una visita a California tiene que incluir un paseo por el denominado “museo más ecológico de la tierra”.
El museo está destinado a ser un centro de investigación y expone trabajos sobre el cambio climático y la evolución de las especies en Madagascar y Galápagos.
La estructura del edificio presenta un techo ondulado que semeja las colinas naturales, cubierto con el mismo grass extraído del suelo del área en el que el museo se levantó. Además, mediante un sistema computarizado, unas compuertas se abren y cierran para permitir el paso de la refrescante brisa del pacífico. El reciclaje y la conservación de la energía son elementos primordiales en la arquitectura del museo.
El edificio se encuentra sobre la 55 Music Concourse Drive, en San Francisco. Y su horario de atención es de lunes a sábado de 9:30 a 5:00 p.m., y los domingos desde las 11 hasta las 5 p.m.
Su número telefónico es el (415) 379.8000 y su web oficial es www.calacademy.org.
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