Festival de Tulipanes

Holland es ciudad del Estado de Michigan, cerca de la costa oriental del Lago. Es el municipio más grande del área metropolitana Holland-Grand Haven, formada por muchas comunidades habitadas por descendientes directos de los holandeses que fundaron los Estados Unidos, con nombres como Harlem, Zelanda, Graafschap y otros de indudable origen holandés.

Como no podía ser de otro modo, aquí se celebra, en mayo de cada año desde 1929, el impactante Festival de Tulipanes, con más de quinientas mil flores en toda la ciudad, inundando de color sus parques, calles y áreas públicas. Los jardines de tulipanes comienzan en la esquina de la calle 12 y la River Avenue, y se extienden a lo largo de seis kilómetros incluyendo la costa y el Parque Centenario.

En realidad este festival es uno de los muchos que se realizan en las ciudades norteamericanas fundadas por holandeses, pero el de Holland es uno de los más grandes y se realiza ininterrumpidamente desde la exposición inaugural; de hecho, está considerado entre los veinte festivales más importantes del mundo y uno de los 100 más populares de los Estados Unidos.

En 1927, una profesora de la Escuela Secundaria Holland sugirió que la ciudad adoptará el tulipán como flor oficial. Al año siguiente se trajeron 100.000 bulbos de tulipanes directamente desde los Países Bajos y se plantaron en todos los parques de Holland y al otro se realizó la primera edición del Festival.  Actualmente, el festival es una celebración de la herencia y cultura holandesa que convoca a todos por igual e invita a disfrutar con los cinco sentidos: desfiles, danzas, gastronomía, teatro, conciertos y eventos para niños. El festival comenzó como un evento pequeño, con la idea de conmemorar el patrimonio holandés, pero el éxito fue abrumador y actualmente cuenta con más de cien mil participantes cada año.

Se inaugura con un magnífico festival de fuegos artificiales; algunos eventos se desarrollan en el Centennial Park, como la Feria de Artes y Artesanía, con obras bellas y originales y paseos en auténticos carros holandeses. También se festeja el Carnaval en el Centro Cívico, con paseos, juegos y mucha comida. Otras atracciones son el Mercado Holandés, los talleres de arte floral, talleres de tulipanes y atracciones para niños de todas las edades.

Es muy fácil llegar a Holland en automóvil, pero no tanto en transporte público. Lo mejor es viajar desde Chicago o Detroit por las carreteras US31 o I96. También pueden tomar el ferrocarril de la línea Pere Marquette entre Grand Rapids y Chicago.

Foto: vía

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