Un grupo de aficionados al “trolley” o tranvía consiguió restaurar casi cien vagones de este tradicional sistema de transporte que se usaron entre 1878-1962; es el Museo del Tranvía de East Haven, que nos espera para abordar los históricos coches y recorrer un camino a lo largo de la historia y la costa de Connecticut.
Esta línea de tranvías fue muy importante en la vida de la comunidad y desde 1945 se hacen esfuerzos para preservación de este patrimonio único en su especie y que corre peligro de extinción; actualmente los cien vagones, artefactos y documentos de la época conforman una colección cuidadosamente conservada por casi mil entusiastas voluntarios y miembros de la Asociación.
Visitar este museo rodante es una fascinante experiencia al pasado que se vive con todos los sentidos, desde escuchar el rugido de los motores hasta sentir los detalles de los asientos de y los detalles de madera barnizada.
El Museo sostiene también el ferrocarril eléctrico Branford que ha sido declarado Monumento Histórico Nacional; de hecho, es la línea de tranvías en funcionamiento más antigua de los Estados Unidos. El acervo del Museo está integrado por alrededor de cien coches de transporte, alrededor de treinta mil fotografías, cuatro mil libros y documentos y cerca de mil objetos pequeños.
Los coches en los que se puede viajar son varios y de distintas características, como por ejemplo uno de 1911 bastante inusual ya que es de madera y tiene el piso de concreto; recorrió durante mucho tiempo las calles de New Haven y es muy popular.
También encontraremos aquí el coche 850 de la ciudad del transporte de la ciudad de Nueva Orleans: es el famoso tranvía llamado Deseo, inmortalizado por el escritor Tennesse Williams que con esta obra ganó el premio Pulitzer en 1948 y que también fue llevada al cine por el director Elia Kazan. Nueva Orleans se enorgullece de contar con la línea de tranvías más antigua del país, operando coches de 1924.
Otras joyas de la colección son el convertible Brooklyn 4573, un descapotable centenario, y el Johnstown 357, un sobreviviente de la gran inundación de 1938, completamente restaurado.
Si eres un entusiasta de los tranvías históricos, te informamos que el Museo del Tranvía ofrece oportunidades a los voluntarios para distintas tareas, como por ejemplo arreglar motores, restaurar integralmente los vehículos, realizar las visitas guiadas manejando el tranvía, relacionarse con el público, investigar en bibliotecas, documentos, publicaciones y archivos, ordenar y clasificar el patrimonio del Museo, diseño e instalación de exposiciones… en fin, hay tareas para todos los gustos y tiempo disponible.
El “Shore Line Trolley Museum” se encuentra en 17 River Street, East Haven, Connecticut.
Foto: Wiki Commons