Museo harley-davidson

Esta industria que empezó en 1903 en un cobertizo y ciento cinco años después posee una planta de fabricación de 400.000 m2, aún utiliza su distintiva “V” del motor con doble árbol de levas de estas motocicletas que hicieron historia.

Una visita aquí comienza con un video de introducción y un recorrido por la planta real, donde los visitantes pueden ver el mecanizado de piezas y el montaje de los motores que realizan trabajadores, ordenadores e incluso robots.

El Museo Harley-Davidson abrió sus puertas en julio de 2008: 130.000 m2 para conocer la historia y la evolución de la fábrica añadiendo una nueva dimensión a la experiencia Harley-Davidson, ya que cada galería y exposición es un testimonio de las legendarias motos, la gente que trabajó y lo que cada uno sintió cada vez que escuchó su poderoso estruendo en un largo tramo de asfalto.

El museo alberga una fantástica colección de más de 450 motocicletas, fotografías, videos, ropa, documentos raros y archivos hasta ahora nunca vistos por el público, y un Salón de la Leyenda donde la gente crea y deja mensajes personalizados acerca de su experiencia con la Harley-Davidson.

La visita al Museo nos permitirá conocer también la arquitectura industrial y los detalles e la construcción tanto dentro como fuera de sus tres edificios, y un audio-tour nos acompañará a lo largo de todo el recorrido con las voces de los pilotos y héroes que hicieron la leyenda de la Harley-Davidson.

El Museo cuenta con condiciones de accesibilidad para personas con capacidades diferentes, dispone de una cantidad limitada de sillas de ruedas (los usuarios pueden acceder con la propia) y servicio de escucha asistida.  Se puede pasar todo un día aquí: visitarlo por la mañana, almorzar en la fábrica y luego tomar el transporte gratuito al Miller Park para ver los juegos de pelota, o llevar tu propia manta y silla y disfrutar del atardecer en el jardín del museo, saboreando los tragos y bocadillos que preparan especialmente.

Renglón aparte para el tema comer en el Museo: según se comenta, aquí sirven gigantescas porciones de comida americana, como aros de cebolla, ensalada de pollo, hamburguesas con queso cheddar y pastel de duraznos de Georgia; o puedes pasar por el café, donde sirven frescos bocados para seguir andando, como suaves pretzels y pasteles caseros de frutas de bolsillo.

El Museo se encuentra en 11700 W. Capitol Dr., Milwaukee, Wisconsin; en su tienda podrás adquirir chaquetas de cuero y carteles que no se consiguen en ningún otro lugar.

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